Resulta increíble ver cómo unos y otros se muestran sorprendidos (a veces gratamente, otras no tanto) por la nacionalización de la banca que se avecina. La más conocida en Estados Unidos, seguida de otros programas menos publicitados como el británico o el alemán. En España se nos dice que de momento no se va a nacionalizar, pero que están con las manos lavadas, los guantes puestos y el bisturí en ristre, dispuestos a saltar al quirófano en cuanto haga falta.
Algunos se echan las manos a la cabeza temiendo la llegada del neocomunismo. Otros se enorgullecen con el fracaso del sistema salvaje del capitalismo. Y sin embargo a mí me parece todo una mascarada en la que pasado un tiempo, el Estado venderá su participación a manos privadas, y todo volverá a comenzar. Esto son remedios paliativos. Una vez pase el temporal, y la crisis se yaha despejado, y se hayan reprivatizado los bancos, todos los consejos de administración volverán a desear el crecimiento exponencial año tras año, y esto volverá a suceder tarde o temprano.
Porque no nos engañemos. ¿Quiénes son los que suben al poder (al margen de colores políticos, aquí, allá o aculla)? ¿No es casualidad que las grandes corporaciones y los gobiernos se intercambien personal? ¿Qué más da que gobierne yo, o gobiernes tú? Es un pacto entre caballeros. Un quid pro quo. Un hoy por tí, y mañana por mí. Nos llevamos la pasta, y quien esté el poder, que se encargue de repartir el agujero entre los proletarios. ¿Soy el único al que todo esto le parece una monumental farsa de proporciones planetarias? ¿Soy el único que ve en estas operaciones una nacionalización de las pérdidas tras haber privatizado los beneficios? ¿Soy el único que sospecha que pasado mañana, pasado el temporal, los bancos volverán a ser tan privados como antes de la tormenta? ¿Soy el único que piensa que todo esto es una tremenda operación de blanqueo de capital en el que los que quisieron salir con la pasta, ya huyeron del barco, y ahora serán los gobiernos, con el dinero de todos los demás, quienes saquen las castañas del fuego? Espero no estar tan solo.
1 comentarios. Deja alguno tú.:
No estás sólo,... pero no se puede hacer nada.
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